Acné en perros: causas, síntomas, tratamientos

El acné del perro joven o la forunculosis del mentón se pueden superar con tratamientos naturales o convencionales. ¡Descubre cuáles!

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¿Qué es el acné del perro?

El acné del perro es el nombre común que se le da a una afección de la piel que afecta a los perros jóvenes y también se conoce con el término médico forunculosis del mentón.

Sería una dermatosis probablemente ligada a un trastorno primario de la queratinización o del funcionamiento pilosebáceo y complicada con una infección bacteriana profunda (pioderma).

El acné del mentón en perros: sus manifestaciones

El acné canino afecta generalmente a perros de razas propensas a esta condición entre los 3 y los 12 meses de edad.

¿Qué razas de perros son propensas al acné en la barbilla?

El Bóxer, el Gran Danés y el Dobermann son razas propensas al acné del mentón. La condición también se describe en otras razas como el dogo argentino, bull terrier, bulldog, weimaraner, pastor australiano, husky siberiano, labrador, rottweiler, shar pei y staffordshire terrier americano.

La dermatosis se caracteriza por la aparición de comedones (especie de grandes "puntos negros" ), pústulas (" granitos blancos" ) y forúnculos en el mentón y los labios del perro. En algunos casos, se puede observar edema del mentón, es decir, hinchazón de la piel del mentón.

Cuando la afección se vuelve crónica, la piel afectada puede volverse negra y liquenificada: la piel se espesa en parches cuadrados con surcos claramente visibles. La liquenificación suele ser secundaria al prurito (sensación de picor) causado por una sobreinfección bacteriana.

Más raramente, las lesiones pueden extenderse a los pabellones auriculares del perro y/o al hocico (región situada encima de la nariz, en el hocico).

¿Cómo se trata el acné canino?

La sobreinfección asociada al acné canino justifica la prescripción de antibióticos para administrar por vía oral al perro durante varias semanas. Esta terapia antibiótica sistemática se combina generalmente con tratamientos locales antisépticos y antibióticos en forma de champús.

Si es necesario, el veterinario puede prescribir otros tratamientos, en particular retinoides tópicos o sistémicos destinados a regular el proceso de queratinización y prevenir las recaídas que, en el caso del acné canino, pueden ser múltiples.

La mayoría de las veces las lesiones se curan por completo, a veces a costa de un tratamiento bastante largo y ciclos repetidos de antibióticos. No obstante, las cicatrices pueden persistir en algunos perros y provocar daños estéticos en los animales de exhibición.

Fitoterapia al rescate del acné canino!

En apoyo del tratamiento convencional del acné canino, las plantas pueden ser de gran ayuda para llevar a su perro por el camino de la recuperación.Tomada por vía oral, la bardana regula la secreción de sebo, alivia el prurito, favorece la eliminación de toxinas y limita la inflamación. Combinado con la equinácea antiinfecciosa y el regaliz inmunomodulador y antiinflamatorio, puede ser muy útil en el tratamiento del acné. Siempre busque el consejo de un veterinario especializado antes de usar estas plantas solas o en una mezcla para su perro, con el fin de evitar interacciones medicamentosas y conocer las contraindicaciones y la dosis.

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