Dar ajo a tu perro: ¿es peligroso?

El ajo, al que se suele atribuir propiedades naturales para el control de plagas, ¿es beneficioso o, por el contrario, tóxico para los perros?

¡Ayuda al desarrollo del sitio, compartiendo el artículo con amigos!

Sí, el ajo es tóxico para los perros

Al ajo se le suele atribuir propiedades antiparasitarias para perros. Que quede claro: usar ajo para desparasitar a tu perro es ineficaz o peligroso para el perro porque la dosis efectiva de ajo para tener actividad desparasitante es mayor que su dosis tóxica en los animales.

Como todas las plantas del género Allium, que también incluye cebollas, el ajo contiene tiosulfato de sodio, una sustancia que interrumpe la actividad de ciertas enzimas y puede causar anemia por destrucción de los glóbulos rojos del animal.

La intoxicación por ajo evoluciona a lo largo de varios días.Generalmente comienza de 1 a 2 días después de ingerir ajo (aún más rápido si la ingestión es masiva) y se manifiesta tempranamente en vómitos, anorexia y en ocasiones diarrea. Esto da como resultado fatiga, membranas mucosas pálidas y decoloración de la orina, que se vuelve oscura, incluso marrón.

Si la intoxicación por ajo no suele ser mortal (si las cantidades ingeridas son moderadas y el tratamiento se instaura precozmente), es mejor no correr el más mínimo riesgo dándole ajo a tu perro, sobre todo porque su organismo puede tardar varias días para eliminar las toxinas.

El ajo, en altas dosis, es por tanto tóxico en todas sus formas para perros y gatos, ya sea cocido o crudo, fresco, deshidratado o incluso fermentado. Por lo tanto, tenga cuidado de no darle a su mascota restos de comidas cocinadas que contengan ajo. También prohíba todos los antiparasitarios naturales a base de ajo en su perro y gato.

¿Qué alternativas al ajo como antiparasitario natural?

Afortunadamente, existen muchas plantas con actividad antiparasitaria (más o menos eficaz) que no suponen ningún peligro para los perros.

Este es especialmente el caso del extracto de nuez fitoestandarizado o del aceite de pepita de calabaza (o pepitas de calabaza en polvo), dos productos naturales que pueden utilizarse como desparasitantes naturales en perros para luchar contra los parásitos intestinales. Estos remedios a base de hierbas se administran a razón de 3 mg por 10 kg de peso corporal (o 4 g de polvo por 10 kg de peso corporal) 3 días seguidos, en el momento de la luna llena y por la mañana después del ayuno nocturno.

Ciertos aceites esenciales también pueden tener eficacia antiparasitaria en perros, pero su uso debe ser estrictamente supervisado por un veterinario especializado.

Cabe señalar, sin embargo, que la eficacia de estas alternativas naturales no está absolutamente probada ni es equivalente a los antiparasitarios medicinales convencionales, a la venta en las consultas veterinarias.

¡Ayuda al desarrollo del sitio, compartiendo el artículo con amigos!