¿Qué es una úlcera gástrica? ¿A qué se debe?
Una úlcera gástrica o úlcera péptica se refiere a una llaga que se forma en la pared del estómago o el duodeno.
En los perros, la úlcera gástrica suele ser secundaria a la administración de fármacos "corrosivos" contra la mucosa gástrica como los antiinflamatorios no esteroideos o los corticoides.
También puede ser consecuencia de otra condición como:
- tumores digestivos (gastrinoma o mastocitoma),
- la presencia de un cuerpo extraño,
- insuficiencia renal, insuficiencia hepática o hipocorticismo,
- enfermedades inflamatorias crónicas,
- gastritis,
- gastroenteritis hemorrágica relacionada en particular con el parvovirus,
- pancreatitis aguda,
- sepsis,
- traumatismo craneoencefálico,
- afecciones neurológicas,
- colonización del tracto digestivo por una bacteria llamada helicobacter pylori (aunque esto aún no ha sido probado formalmente en perros),
- hipovolemia.
¿Cuáles son los síntomas de una úlcera gástrica en perros?
La úlcera gastrointestinal es una de las principales causas de vómitos crónicos en perros. Estos a menudo están relacionados con la alimentación y contienen moco y/o sangre rojos o parcialmente digeridos.
La úlcera gástrica también puede provocar otros síntomas como dolor abdominal, anorexia, pérdida de peso, melena (presencia de sangre digerida de color negro en las heces) y signos de anemia .
Si la úlcera está perforada, puede complicarse con un estado de shock séptico.
Pero una úlcera también puede ser asintomática y pasar desapercibida para el propietario.
¿Cómo se diagnostica una úlcera gástrica?
El diagnóstico definitivo se puede obtener mediante una endoscopia gastroduodenal y una biopsia gástrica o duodenal para determinar la causa de la úlcera.
El veterinario también puede utilizar una ecografía o, más raramente, una radiografía con producto de contraste.
Para determinar el origen de la(s) úlcera(s) péptica(s), el veterinario también puede solicitar análisis de sangre.
¿Cómo se puede tratar?
Además de tratar la afección que causa la úlcera, el tratamiento generalmente incluye medicamentos antisecretores y agentes que cubren la mucosa gástrica.
La La fitoterapia también puede ayudar a los animales que padecen úlceras, en particular gracias al regaliz, una planta antiulcerosa y antiinflamatoria. Pide consejo a un veterinario especializado que podrá prescribirte la sinergia de plantas que se adaptará al caso particular de tu animal.