Quimioterapia, ¿para qué?
La quimioterapia es el uso terapéutico de agentes medicinales para destruir o inhibir el crecimiento y la división de las células cancerosas.
La quimioterapia ataca procesos específicos que ocurren dentro de la célula (como la replicación del ADN) u otras actividades celulares que son necesarias para la replicación celular.
¿En qué casos se utiliza la quimioterapia en perros?
La quimioterapia se puede utilizar en diferentes casos.
Quimioterapia adyuvante
La quimioterapia adyuvante se usa después de la cirugía cuando el cirujano no ha podido extirpar todo el tumor, cuando los tumores son extensos o cuando existe un riesgo metastásico significativo.
En los perros, los tumores para los que este enfoque se usa regularmente incluyen el osteosarcoma, el hemangiosarcoma, pero también los cánceres de ubre, tiroides, saco anal, vejiga o amígdalas.
Quimioterapia paliativa
La quimioterapia también se puede utilizar para mejorar la calidad de vida del animal sin esperar una remisión completa después del tratamiento. La quimioterapia paliativa se utiliza generalmente en el tratamiento de tumores inoperables.
Quimioterapia neoadyuvante
También llamada quimioterapia de inducción o inductiva, la neoadyuvancia consiste en administrar un tratamiento antes de la cirugía.Se supone que así reducirá el tamaño y la invasividad de un tumor primario, lo que aumenta la tasa de curación quirúrgica.
¿Cómo se administra la quimioterapia?
La quimioterapia se puede administrar de varias formas, según el tipo de fármaco quimioterápico y el protocolo utilizado, que obviamente depende del tipo de cáncer y del animal.
Los protocolos tradicionales se basan en administrar la dosis mejor tolerada, seguida de un descanso (de una a algunas semanas, según el protocolo) antes de la siguiente dosis. Según el fármaco, la quimioterapia se puede administrar mediante una inyección o una tableta oral. La duración mínima de la hospitalización es de 24 horas después de cada administración de fármaco anticanceroso y todos los residuos de citotóxicos segregados por el animal (en su orina, heces o posibles vómitos durante los días siguientes a cada sesión de quimioterapia) deben ser manipulados y eliminados con especiales precauciones.
Para ciertos tipos de cáncer, el veterinario puede utilizar los llamados protocolos metronómicos. Consisten en la administración crónica, a intervalos regulares, de fármacos quimioterápicos en dosis bajas, habitualmente a diario o en días alternos.
¿Cuáles son los efectos secundarios de la quimioterapia?
La quimioterapia se dirige específicamente a las células que se multiplican rápidamente, como es el caso de las células cancerosas, pero también de ciertas células sanas, como las de los folículos pilosos, el intestino o la médula ósea.
Al destruir estas células sanas, la quimioterapia puede causar efectos secundarios como:
- trastornos hematológicos: el daño a las células de la médula ósea puede reducir la cantidad de glóbulos rojos en perros y glóbulos blancos. En consecuencia, el perro puede mostrar signos de anemia y mostrar una disminución de su inmunidad que lo hace más susceptible a los gérmenes oportunistas.Una disminución transitoria y reversible en el recuento de glóbulos blancos a veces puede provocar fiebre, fatiga o incapacidad para combatir una posible infección,
- trastornos digestivos como disminución del apetito, vómitos, diarrea o estreñimiento,
- pérdida de cabello o alopecia,
- problemas del corazón,
- problemas renales,
- trastornos hepáticos,
- trastornos nerviosos,
- trastornos de la coagulación de la sangre,
- etc.
Los efectos secundarios dependen no solo de las moléculas utilizadas sino también del animal.
Para limitar la aparición de estos efectos secundarios, se realizan exámenes regulares en perros que reciben quimioterapia para asegurarse de que el protocolo esté bien respaldado. Antes de cada tratamiento de quimioterapia, el veterinario realiza en particular análisis de sangre para comprobar la cantidad y calidad de las células sanguíneas de tu mascota.
Debe tenerse en cuenta, sin embargo, que si se toman todas las precauciones necesarias, los efectos secundarios de la quimioterapia en perros no son de ninguna manera comparables a los efectos secundarios de la quimioterapia en humanos. Estos efectos solo se observarían en el 25 al 30 % de los perros tratados y, en la mayoría de los casos, son de baja intensidad y transitorios.
Siempre tenga en cuenta que su veterinario no le ofrecerá este tipo de tratamiento si cree que su perro no lo tolerará bien o si tiene un tumor que se sabe que no responde bien a los medicamentos de quimioterapia veterinaria actuales.
Fitoterapia al rescate
" La fitoterapia puede apoyar la quimioterapia al ayudar al cuerpo del perro a soportar mejor los tratamientos con medicamentos contra el cáncer, para limitar la pérdida de masa muscular asociada con el cáncer y para reducir el dolor. Por otro lado, cuando se está realizando un tratamiento contra el cáncer, los remedios herbales deben ser prescritos imperativamente por un veterinario especializado debido a las múltiples interacciones posibles con los medicamentos.Tenga en cuenta que también existen muchos tratamientos anticancerígenos alternativos a la medicina herbal destinados a superar los tratamientos quimioterapéuticos convencionales. Existen tratamientos a base de vainilla de Tahití y corteza de Cinchona (DNA PKASE Inhibat) o a base de muérdago (VAF o Viscum Album Fermenté) que pueden ser de gran ayuda. Habla con un veterinario especialista."