De Saboya a Gard
Pablo, es este perrito Jagdterrier que vimos en todos los medios, desde la prensa escrita hasta el noticiero de las 13 hs. Y por causa ! El animalito habría recorrido una distancia extraordinaria en un tiempo récord para volver a casa.
Catherine Oriol y Roger Simonis, los dueños de Pablo, que se fue de vacaciones a Saboya, habían perdido el rastro de su perrito cuando éste, como siempre, había salido a dar un paseo en solitario. A las pocas horas de su partida, la pareja comenzó a preocuparse al no ver regresar a su animal.Antes de partir de Savoie al día siguiente, Catherine y Roger informan de la desaparición de su perrito al ayuntamiento de Albertville y a los refugios locales, y luego van a la casa de su hija en Ain con la esperanza de que alguien los contacte.
Dos días después, reciben un mensaje no de Saboya sino de Bezouce en Gard, su lugar habitual de residencia. Fue una amiga de la pareja, Estelle, que se había quedado en Bezouce para vigilar la casa, quien le envió a avisarles del regreso de Pablo, foto de apoyo.
380 km a pie?
¡Increíble pero cierto! El perrito había recorrido los 380 km que separaban Saint-Martin-de-Belleville en Saboya de Bezouce en el Gard para volver a casa.
La amiga del dueño de Pablo no podía creer lo que veía cuando recogió al perrito que describió como exhausto y completamente deshidratado al llegar.
Pablo no es la primera mascota que ha viajado tales distancias para encontrar su hogar, pero lo desconcertante, en su caso, es la velocidad con la que pudo llegar a su hogar.
Suponiendo que el animal hiciera todo el viaje "sobre patas" , habría tenido que caminar las 24 horas del día a un ritmo de 6km/hora y recorrer casi 150km diarios para llegar allí. Incluso si sus dueños describen a Pablo como particularmente resistente, es poco probable que lo haya logrado por sí solo, especialmente porque sus almohadillas no mostraron signos de erosión.
Varias hipótesis parecen surgir entonces para explicar la destreza de Pablo, incluida la de un viaje en camión de ganado. Lo que hace más plausible esta hipótesis es que cuando llegó, el perrito ostentaba un fuerte olor a granja. Por lo tanto, podría haberse subido a un camión de transporte de animales que, por una feliz coincidencia, lo habría acercado a Bezouce y luego huido cuando los animales estaban descargados para terminar el viaje a pie.
Pablo está bien
Hoy, el pequeño Pablo se ha recuperado bien y ha encontrado a sus dueños que, para evitar otro percance, le han puesto un collar GPS.
En cuanto a cómo el pequeño Jagdterrier llegó a casa tan rápido, ¡el misterio permanece! Solo Pablo tiene la verdad.