Pannus en perros: causas, síntomas y tratamiento

¿Qué es pannus? ¿Cuáles son los primeros signos de la enfermedad y cómo podemos frenar su progresión?

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Pannus, también llamada queratitis crónica superficial

Pannus también se conoce como queratitis superficial crónica. Es una condición inmunomediada que afecta la córnea del ojo.

Afectando a ambos ojos, ocurre principalmente en razas de perros que se sabe que están predispuestas, como el berger picard, el pastor belga, el collie de pelo largo y corto, el perro pastor de Shetland y el galgo.

¿Cuáles son los signos clínicos del pannus?

Cuando la afección comienza a manifestarse, se puede formar una masa rosada ligeramente elevada en la córnea, con mayor frecuencia en el lado lateral, fuera y debajo del ojo.Esta masa corresponde en realidad a una neovascularización de la córnea, es decir, a la aparición de vasos sanguíneos pequeños, largos y tortuosos en la superficie de la córnea.

Ambos ojos del perro suelen verse afectados, pero a veces en diferentes grados.

A medida que avanza la patología, la lesión se extiende a la mitad inferior de la córnea antes de llegar a toda ella y luego se pigmenta, resultando en una opacificación de la córnea. Si esta condición no es dolorosa para el perro, puede, en ausencia de tratamiento, provocar la ceguera del animal.

En una cuarta parte de los casos, el pannus puede ir acompañado de una inflamación del tercer párpado del perro, también conocida como membrana nictitante. El tercer párpado aparece entonces engrosado e inflamado. También puede haber secreción mucoide.

¿Qué causa el pannus?

Pannus es una enfermedad hereditaria, de origen autoinmune, que se desarrolla con la edad del animal.

Es probable que los factores predisponentes, como una mayor exposición a la radiación ultravioleta, las grandes altitudes y el humo, contribuyan al desarrollo de pannus y ciertamente pueden empeorarlo.

¿Cómo lo tratamos?

El tratamiento implica el uso de corticosteroides tópicos u otros medicamentos inmunomoduladores como la ciclosporina. Estos tratamientos, que generalmente vienen en forma de gotas para ser instiladas en los ojos del animal, ayudan a limitar la progresión de la enfermedad.

Debido a la influencia de los rayos ultravioleta en el desarrollo de la enfermedad, es posible que su veterinario le recomiende el uso de gafas de sol para perros en estancias en altura o en periodos estivales con el fin de proporcionar una protección extra a su mascota.

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